La canción del Universo
La naturaleza nos está enseñando constantemente sobre el amor y la comprensión perfecta de una inteligencia superior para cada creación. La frecuencia de luz que baja de los cielos para animar, iluminar, sanar y bendecir es incalculable. Gobierna la vida misma en este planeta. La tierra vibra a 7.82Hz (cerca de 8Hz), lo que se llama resonancia de Schumann.
La diferencia entre la vibración de la tierra y el sol es de 54 octavas, y ambas están en una relación armónica. El cuerpo humano, al estar formado por elementos de la tierra, resuena con las armonías de los planetas y los cielos, que gobiernan la rotación y los ritmos de la tierra y las aguas sobre ella. Los átomos no pueden formarse en materia sin la música correcta de las esferas y los cielos.
Muchos sitios antiguos reflejan el número 432 en su alineación con estrellas y planetas y el camino de la tierra a través del espacio: Avebury, Stonehenge, la Gran Pirámide de Egipto...
432 son los hercios necesarios para armonizar la sagrada trinidad en el ser: AMOR, VOLUNTAD y SABIDURIA.
